Ya sé que sin duda muchos de mis pensamientos actuales están marcados por el pesimismo y el duelo, pero, por otro lado creo que cuando percibo que nada tiene sentido en mi vida estoy siendo lúcido y no pesimista. Anteriormente ya era así, pero a la esterilidad de antes se ha sumado la falta de consuelo de tenerte a ti. Nada vale, pero ahora ni siquiera puedo compartir las pequeñas cosas que nada significan y que maquillan la falta de rumbo de mi vida. Ya no puedo llamarte por teléfono desde una cabina en el extranjero, ya no puedo enseñarte la última tontería que compré, ya no puedo decirte alguna de las cosas que siento. No volveré a sentir tus cuidados y tu cariño. La misma nada de antes, pero ahora descarnada y desierta. La ternura y el amor se fue contigo. Lo que queda, permanece doliente y abandonado en mi corazón.

Entradas populares